El fundador de OpenAI, Sam Altman, emitió una nueva declaración el 7 de noviembre, en respuesta a las dudas externas sobre si la empresa busca financiamiento o garantías del gobierno para su centro de datos de IA. Él declaró claramente que OpenAI no desea ni necesita garantías gubernamentales, y enfatizó que el gobierno no debería tomar partido por las empresas, y mucho menos permitir que los contribuyentes paguen por los errores de las empresas privadas.
El mercado decide las ganancias y pérdidas, sin depender de rescates gubernamentales.
Altman dejó claro que OpenAI nunca ha buscado garantías del gobierno y se opone a cualquier forma de subsidio. Él dijo:
"El gobierno no debería tomar partido por las empresas, y mucho menos permitir que los contribuyentes paguen los errores de las empresas privadas. Si fracasamos, debería ser el mercado quien decida quién gana y quién pierde."
Él agregó que, si el gobierno desea construir y poseer su propia infraestructura de IA, eso sería propiedad pública y sus beneficios también deberían ser compartidos por el gobierno y toda la población, en lugar de beneficiar a las empresas privadas. Alt