El creador de mercado Citadel Securities envió el martes una carta a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), recomendando endurecer la regulación sobre las finanzas descentralizadas (DeFi). Considera que las plataformas DeFi que ofrecen acciones estadounidenses tokenizadas deben estar sujetas a la legislación sobre valores y no deben recibir exenciones. Citadel sostiene que las plataformas DeFi probablemente encajen en la definición de “bolsa” o “corredor/agente de bolsa”, lo que ha provocado una fuerte oposición de la comunidad cripto.
Punto clave de Citadel: neutralidad tecnológica no equivale a exención regulatoria
(Fuente: SEC)
Esta carta de Citadel Securities responde a la consulta pública de la SEC sobre cómo regular las acciones tokenizadas. El argumento central de Citadel se basa en el principio de “neutralidad tecnológica”: consideran que, independientemente de la tecnología utilizada para negociar valores, deben aplicarse los mismos estándares regulatorios. Las bolsas tradicionales deben registrarse, ser supervisadas y cumplir estrictas normas de protección al inversor; si una plataforma DeFi ofrece servicios equivalentes, debería asumir las mismas obligaciones.
Citadel señala: “Conceder amplias exenciones para facilitar la negociación de acciones tokenizadas vía protocolos DeFi crearía dos marcos regulatorios distintos para la negociación de los mismos valores. Esto iría completamente en contra del enfoque de ‘neutralidad tecnológica’ adoptado por la Ley de Bolsa de Valores.” Este argumento es lógicamente persuasivo: si una acción requiere estricta regulación en una bolsa tradicional, pero puede estar exenta en una plataforma DeFi, realmente se genera un espacio para el arbitraje regulatorio.
Sin embargo, la comunidad cripto considera que este argumento confunde la diferencia esencial entre plataformas y entidades intermediarias. Las bolsas tradicionales son instituciones centralizadas que controlan los fondos de los usuarios y la ejecución de las operaciones, por lo que requieren supervisión para evitar abusos de poder. Los protocolos DeFi, en cambio, son código abierto, cualquiera puede auditar y verificar el funcionamiento, y no existe una entidad única que controle los fondos de los usuarios. Desde este punto de vista, DeFi es más una herramienta tecnológica que un intermediario financiero.
En julio, Citadel también envió una carta al grupo de trabajo sobre criptomonedas de la SEC, argumentando que los valores tokenizados “deben tener éxito a través de la innovación y eficiencia reales para los participantes del mercado, no mediante el arbitraje regulatorio egoísta”. Esta formulación sugiere que Citadel considera que los proyectos actuales de acciones tokenizadas DeFi explotan vacíos regulatorios más que aportar innovación de valor real.
Tres demandas clave de Citadel
Principio de neutralidad tecnológica: El mismo valor debe estar sujeto a los mismos estándares regulatorios, sea cual sea la plataforma donde se negocie.
Ampliación de la definición de bolsa: Si una plataforma DeFi ofrece negociación de valores, debe considerarse bolsa o corredor/agente de bolsa.
Rechazo de exenciones regulatorias: Desarrolladores, programadores de contratos inteligentes y proveedores de monederos no deben recibir exenciones.
Si la SEC adopta estas demandas, el impacto sobre toda la industria DeFi sería fundamental. Muchos desarrolladores de protocolos DeFi eligen modelos de gobernanza descentralizada precisamente para evitar convertirse en entidades reguladas. Si la SEC considera que el propio protocolo debe registrarse como bolsa, estos proyectos podrían verse obligados a cerrar o migrar a jurisdicciones con una regulación más laxa.
Furiosa respuesta de la comunidad cripto: desenmascarando el conflicto de intereses
La carta de Citadel ha provocado el rechazo de la comunidad de criptomonedas y de organizaciones que promueven la innovación en blockchain. El abogado y miembro de la junta de Blockchain Association, Jake Chervinsky, ironizó el jueves en redes sociales: “¿Quién podría pensar que Citadel estaría en contra de innovaciones que eliminan a los intermediarios depredadores y extractores de rentas del sistema financiero? Ah, sí, todos en el sector cripto.” Esta ironía apunta directamente al conflicto de intereses de Citadel.
Citadel Securities es uno de los mayores creadores de mercado del mundo, obteniendo miles de millones de dólares anuales en beneficios por la intermediación de valores. Las plataformas DeFi, mediante mecanismos de creador de mercado automatizado (AMM), permiten que cualquiera aporte liquidez y gane comisiones, amenazando de raíz el modelo de negocio de creadores de mercado tradicionales como Citadel. Desde esta perspectiva, la presión regulatoria de Citadel sobre DeFi parece más una defensa de sus intereses que una preocupación genuina por la protección del inversor.
El fundador de Uniswap, Hayden Adams, añadió: “Es comprensible que los reyes del market making financiero injusto no aprecien una tecnología open source peer-to-peer que reduce las barreras para crear liquidez.” El comentario de Adams desafía directamente las motivaciones de Citadel. Uniswap, como mayor exchange descentralizado, ha gestionado transacciones por billones de dólares, demostrando la viabilidad de DeFi para la creación de liquidez.
Los creadores de mercado tradicionales como Citadel se benefician del spread y del pago por flujo de órdenes (Payment for Order Flow). El AMM de DeFi distribuye estos beneficios entre los proveedores de liquidez, democratizando el negocio del market making desde instituciones especializadas hacia el usuario común. Esta disrupción del modelo de negocio es la amenaza fundamental que percibe Citadel.
Kristin Smith, directora ejecutiva de la Blockchain Association, afirma: “Regular a los desarrolladores de software como si fueran intermediarios financieros debilitará la competitividad de Estados Unidos, empujará la innovación al extranjero y no aportará nada a la protección del inversor.” Añade: “Instamos a la SEC a rechazar este enfoque excesivamente amplio e irreal y a centrar la supervisión en los verdaderos intermediarios entre los usuarios y sus activos.”
Esta respuesta enfatiza la distinción esencial entre desarrolladores de software e intermediarios financieros. Desarrollar un protocolo DeFi open source es como crear un procesador de textos open source: el desarrollador proporciona la herramienta, pero no controla cómo la usan los usuarios. Exigir a los desarrolladores que asuman la responsabilidad por el uso de sus programas impondría una carga regulatoria inviable y sofocaría la innovación.
SIFMA y la formación de una alianza en la finanza tradicional
La Securities Industry and Financial Markets Association (SIFMA), organización sectorial, publicó el miércoles una declaración similar: apoya la innovación, pero insiste en que los valores tokenizados deben estar sujetos a las mismas protecciones básicas que los inversores tradicionales. SIFMA representa a las principales instituciones financieras de Wall Street, incluidas bancos de inversión, corredores y gestoras de activos. Su postura, alineada con Citadel, muestra que las finanzas tradicionales están formando un frente común contra DeFi.
El informe de SIFMA destaca que la reciente volatilidad en los mercados cripto, incluido el flash crash de octubre, “recuerda oportunamente por qué se establecieron en su día marcos regulatorios a largo plazo para proteger la calidad del mercado y a los inversores”. Este argumento trata de achacar la volatilidad cripto a la falta de regulación y de sugerir que sólo el marco regulatorio tradicional puede proteger a los inversores.
La declaración coincide con la postura adoptada por la asociación en julio, rechazando que la SEC conceda cualquier exención a plataformas blockchain y DeFi que emitan activos tokenizados. En noviembre, la Federación Mundial de Bolsas, que representa a los principales mercados tradicionales como la Bolsa de Nueva York y el Nasdaq, también instó a la SEC a abandonar cualquier plan para conceder “exenciones de innovación” a empresas cripto que quieran emitir acciones tokenizadas.
La formación de esta alianza de finanzas tradicionales no es casual. Los valores tokenizados son una incursión directa de DeFi en el núcleo de las finanzas tradicionales. Mientras las plataformas DeFi sólo negociaban tokens nativos, la banca tradicional podía tolerarlo como un mercado diferente. Pero cuando DeFi empieza a ofrecer versiones tokenizadas de acciones como Apple o Tesla, amenaza directamente el negocio central de bolsas y creadores de mercado tradicionales.
Tres grandes miembros de la alianza anti-DeFi de la finanza tradicional
Citadel Securities: el mayor creador de mercado mundial, teme que el AMM le arrebate parte de su negocio.
SIFMA: asociación del sector, representa los intereses de bancos de inversión y agentes/corredores.
Federación Mundial de Bolsas: representa a las principales bolsas tradicionales como NYSE y Nasdaq.
Esta alianza exige un marco regulatorio para DeFi equivalente al de la finanza tradicional. Sin embargo, la comunidad cripto lo ve como un intento de los intereses establecidos de sofocar la innovación. El desacuerdo clave: ¿la regulación debe basarse en la función (misma función, mismas normas) o en la arquitectura técnica (reglas distintas para centralización y descentralización)?
El dilema regulatorio y el futuro de las acciones tokenizadas DeFi
El núcleo de este debate es la naturaleza de las acciones tokenizadas DeFi. Desde el punto de vista de Citadel, una acción tokenizada de Apple y una acción tradicional de Apple son funcionalmente idénticas, ambas representan propiedad sobre la empresa y, por tanto, deben regirse por la misma ley de valores. Desde la perspectiva DeFi, la acción tokenizada es un activo nuevo: aunque sigue el precio de la acción tradicional, sus mecanismos de negociación, liquidación y custodia son completamente diferentes y no deberían quedar atrapados por marcos regulatorios obsoletos.
El reto para la SEC es encontrar un equilibrio entre la protección del inversor y el fomento de la innovación. Una regulación excesiva podría empujar la innovación DeFi fuera de EE. UU. y debilitar la competitividad del país en blockchain. Pero una exención total podría derivar en arbitraje regulatorio y brechas en la protección del inversor. Informes recientes indican que los fondos de mercado monetario tokenizados ya alcanzan los 9.000 millones de dólares, lo que demuestra el rápido crecimiento del sector y la importancia de las decisiones regulatorias.
El Banco de Pagos Internacionales advierte que la tokenización trae nuevos riesgos, como vulnerabilidades en contratos inteligentes, puentes cross-chain y fragmentación regulatoria. Estos riesgos técnicos no existen en los valores tradicionales y requieren nuevos enfoques de supervisión. Exigir simplemente que DeFi cumpla las reglas diseñadas para bolsas centralizadas podría ser ineficaz para gestionar estos nuevos riesgos.
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¡Citadel arremete contra DeFi! Exige a la SEC que regule las acciones tokenizadas y la comunidad cripto estalla
El creador de mercado Citadel Securities envió el martes una carta a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), recomendando endurecer la regulación sobre las finanzas descentralizadas (DeFi). Considera que las plataformas DeFi que ofrecen acciones estadounidenses tokenizadas deben estar sujetas a la legislación sobre valores y no deben recibir exenciones. Citadel sostiene que las plataformas DeFi probablemente encajen en la definición de “bolsa” o “corredor/agente de bolsa”, lo que ha provocado una fuerte oposición de la comunidad cripto.
Punto clave de Citadel: neutralidad tecnológica no equivale a exención regulatoria
(Fuente: SEC)
Esta carta de Citadel Securities responde a la consulta pública de la SEC sobre cómo regular las acciones tokenizadas. El argumento central de Citadel se basa en el principio de “neutralidad tecnológica”: consideran que, independientemente de la tecnología utilizada para negociar valores, deben aplicarse los mismos estándares regulatorios. Las bolsas tradicionales deben registrarse, ser supervisadas y cumplir estrictas normas de protección al inversor; si una plataforma DeFi ofrece servicios equivalentes, debería asumir las mismas obligaciones.
Citadel señala: “Conceder amplias exenciones para facilitar la negociación de acciones tokenizadas vía protocolos DeFi crearía dos marcos regulatorios distintos para la negociación de los mismos valores. Esto iría completamente en contra del enfoque de ‘neutralidad tecnológica’ adoptado por la Ley de Bolsa de Valores.” Este argumento es lógicamente persuasivo: si una acción requiere estricta regulación en una bolsa tradicional, pero puede estar exenta en una plataforma DeFi, realmente se genera un espacio para el arbitraje regulatorio.
Sin embargo, la comunidad cripto considera que este argumento confunde la diferencia esencial entre plataformas y entidades intermediarias. Las bolsas tradicionales son instituciones centralizadas que controlan los fondos de los usuarios y la ejecución de las operaciones, por lo que requieren supervisión para evitar abusos de poder. Los protocolos DeFi, en cambio, son código abierto, cualquiera puede auditar y verificar el funcionamiento, y no existe una entidad única que controle los fondos de los usuarios. Desde este punto de vista, DeFi es más una herramienta tecnológica que un intermediario financiero.
En julio, Citadel también envió una carta al grupo de trabajo sobre criptomonedas de la SEC, argumentando que los valores tokenizados “deben tener éxito a través de la innovación y eficiencia reales para los participantes del mercado, no mediante el arbitraje regulatorio egoísta”. Esta formulación sugiere que Citadel considera que los proyectos actuales de acciones tokenizadas DeFi explotan vacíos regulatorios más que aportar innovación de valor real.
Tres demandas clave de Citadel
Principio de neutralidad tecnológica: El mismo valor debe estar sujeto a los mismos estándares regulatorios, sea cual sea la plataforma donde se negocie.
Ampliación de la definición de bolsa: Si una plataforma DeFi ofrece negociación de valores, debe considerarse bolsa o corredor/agente de bolsa.
Rechazo de exenciones regulatorias: Desarrolladores, programadores de contratos inteligentes y proveedores de monederos no deben recibir exenciones.
Si la SEC adopta estas demandas, el impacto sobre toda la industria DeFi sería fundamental. Muchos desarrolladores de protocolos DeFi eligen modelos de gobernanza descentralizada precisamente para evitar convertirse en entidades reguladas. Si la SEC considera que el propio protocolo debe registrarse como bolsa, estos proyectos podrían verse obligados a cerrar o migrar a jurisdicciones con una regulación más laxa.
Furiosa respuesta de la comunidad cripto: desenmascarando el conflicto de intereses
La carta de Citadel ha provocado el rechazo de la comunidad de criptomonedas y de organizaciones que promueven la innovación en blockchain. El abogado y miembro de la junta de Blockchain Association, Jake Chervinsky, ironizó el jueves en redes sociales: “¿Quién podría pensar que Citadel estaría en contra de innovaciones que eliminan a los intermediarios depredadores y extractores de rentas del sistema financiero? Ah, sí, todos en el sector cripto.” Esta ironía apunta directamente al conflicto de intereses de Citadel.
Citadel Securities es uno de los mayores creadores de mercado del mundo, obteniendo miles de millones de dólares anuales en beneficios por la intermediación de valores. Las plataformas DeFi, mediante mecanismos de creador de mercado automatizado (AMM), permiten que cualquiera aporte liquidez y gane comisiones, amenazando de raíz el modelo de negocio de creadores de mercado tradicionales como Citadel. Desde esta perspectiva, la presión regulatoria de Citadel sobre DeFi parece más una defensa de sus intereses que una preocupación genuina por la protección del inversor.
El fundador de Uniswap, Hayden Adams, añadió: “Es comprensible que los reyes del market making financiero injusto no aprecien una tecnología open source peer-to-peer que reduce las barreras para crear liquidez.” El comentario de Adams desafía directamente las motivaciones de Citadel. Uniswap, como mayor exchange descentralizado, ha gestionado transacciones por billones de dólares, demostrando la viabilidad de DeFi para la creación de liquidez.
Los creadores de mercado tradicionales como Citadel se benefician del spread y del pago por flujo de órdenes (Payment for Order Flow). El AMM de DeFi distribuye estos beneficios entre los proveedores de liquidez, democratizando el negocio del market making desde instituciones especializadas hacia el usuario común. Esta disrupción del modelo de negocio es la amenaza fundamental que percibe Citadel.
Kristin Smith, directora ejecutiva de la Blockchain Association, afirma: “Regular a los desarrolladores de software como si fueran intermediarios financieros debilitará la competitividad de Estados Unidos, empujará la innovación al extranjero y no aportará nada a la protección del inversor.” Añade: “Instamos a la SEC a rechazar este enfoque excesivamente amplio e irreal y a centrar la supervisión en los verdaderos intermediarios entre los usuarios y sus activos.”
Esta respuesta enfatiza la distinción esencial entre desarrolladores de software e intermediarios financieros. Desarrollar un protocolo DeFi open source es como crear un procesador de textos open source: el desarrollador proporciona la herramienta, pero no controla cómo la usan los usuarios. Exigir a los desarrolladores que asuman la responsabilidad por el uso de sus programas impondría una carga regulatoria inviable y sofocaría la innovación.
SIFMA y la formación de una alianza en la finanza tradicional
La Securities Industry and Financial Markets Association (SIFMA), organización sectorial, publicó el miércoles una declaración similar: apoya la innovación, pero insiste en que los valores tokenizados deben estar sujetos a las mismas protecciones básicas que los inversores tradicionales. SIFMA representa a las principales instituciones financieras de Wall Street, incluidas bancos de inversión, corredores y gestoras de activos. Su postura, alineada con Citadel, muestra que las finanzas tradicionales están formando un frente común contra DeFi.
El informe de SIFMA destaca que la reciente volatilidad en los mercados cripto, incluido el flash crash de octubre, “recuerda oportunamente por qué se establecieron en su día marcos regulatorios a largo plazo para proteger la calidad del mercado y a los inversores”. Este argumento trata de achacar la volatilidad cripto a la falta de regulación y de sugerir que sólo el marco regulatorio tradicional puede proteger a los inversores.
La declaración coincide con la postura adoptada por la asociación en julio, rechazando que la SEC conceda cualquier exención a plataformas blockchain y DeFi que emitan activos tokenizados. En noviembre, la Federación Mundial de Bolsas, que representa a los principales mercados tradicionales como la Bolsa de Nueva York y el Nasdaq, también instó a la SEC a abandonar cualquier plan para conceder “exenciones de innovación” a empresas cripto que quieran emitir acciones tokenizadas.
La formación de esta alianza de finanzas tradicionales no es casual. Los valores tokenizados son una incursión directa de DeFi en el núcleo de las finanzas tradicionales. Mientras las plataformas DeFi sólo negociaban tokens nativos, la banca tradicional podía tolerarlo como un mercado diferente. Pero cuando DeFi empieza a ofrecer versiones tokenizadas de acciones como Apple o Tesla, amenaza directamente el negocio central de bolsas y creadores de mercado tradicionales.
Tres grandes miembros de la alianza anti-DeFi de la finanza tradicional
Citadel Securities: el mayor creador de mercado mundial, teme que el AMM le arrebate parte de su negocio.
SIFMA: asociación del sector, representa los intereses de bancos de inversión y agentes/corredores.
Federación Mundial de Bolsas: representa a las principales bolsas tradicionales como NYSE y Nasdaq.
Esta alianza exige un marco regulatorio para DeFi equivalente al de la finanza tradicional. Sin embargo, la comunidad cripto lo ve como un intento de los intereses establecidos de sofocar la innovación. El desacuerdo clave: ¿la regulación debe basarse en la función (misma función, mismas normas) o en la arquitectura técnica (reglas distintas para centralización y descentralización)?
El dilema regulatorio y el futuro de las acciones tokenizadas DeFi
El núcleo de este debate es la naturaleza de las acciones tokenizadas DeFi. Desde el punto de vista de Citadel, una acción tokenizada de Apple y una acción tradicional de Apple son funcionalmente idénticas, ambas representan propiedad sobre la empresa y, por tanto, deben regirse por la misma ley de valores. Desde la perspectiva DeFi, la acción tokenizada es un activo nuevo: aunque sigue el precio de la acción tradicional, sus mecanismos de negociación, liquidación y custodia son completamente diferentes y no deberían quedar atrapados por marcos regulatorios obsoletos.
El reto para la SEC es encontrar un equilibrio entre la protección del inversor y el fomento de la innovación. Una regulación excesiva podría empujar la innovación DeFi fuera de EE. UU. y debilitar la competitividad del país en blockchain. Pero una exención total podría derivar en arbitraje regulatorio y brechas en la protección del inversor. Informes recientes indican que los fondos de mercado monetario tokenizados ya alcanzan los 9.000 millones de dólares, lo que demuestra el rápido crecimiento del sector y la importancia de las decisiones regulatorias.
El Banco de Pagos Internacionales advierte que la tokenización trae nuevos riesgos, como vulnerabilidades en contratos inteligentes, puentes cross-chain y fragmentación regulatoria. Estos riesgos técnicos no existen en los valores tradicionales y requieren nuevos enfoques de supervisión. Exigir simplemente que DeFi cumpla las reglas diseñadas para bolsas centralizadas podría ser ineficaz para gestionar estos nuevos riesgos.