Los cohetes comerciales ya pueden cotizar en bolsa, ¡qué impresionante!
No es porque puedan cotizar pronto, sino porque por primera vez admiten algo directamente: Algunas cosas, realmente, deben quemar muchos años de dinero primero, para poder tener éxito. Las personas que hacen cohetes comerciales, en estos años, lo que más temen no es el fracaso, sino que antes del fracaso, el camino ya esté bloqueado. El dinero sigue quemándose, la tecnología avanza lentamente, pero el mercado de capitales sigue haciendo la misma pregunta: ¿Cuándo van a ganar dinero? Ahora las reglas están claras: Mientras realmente estés construyendo cohetes, y no solo haciendo PPT, la rentabilidad en sí misma ya no es un pecado mortal.
Por supuesto, los riesgos no han desaparecido, los cohetes todavía pueden explotar, las pruebas todavía pueden fallar. Pero esa especie de pánico de “yo corro desesperadamente hacia adelante, pero no sé si hay una salida al final”, finalmente ha sido reducido en un 50%. Esto no es una oportunidad para hacerse rico de la noche a la mañana, sino para decirle a todos los que todavía persisten: Este camino, al menos, está abierto.
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Los cohetes comerciales ya pueden cotizar en bolsa, ¡qué impresionante!
No es porque puedan cotizar pronto,
sino porque por primera vez admiten algo directamente:
Algunas cosas, realmente, deben quemar muchos años de dinero primero, para poder tener éxito.
Las personas que hacen cohetes comerciales, en estos años, lo que más temen no es el fracaso,
sino que antes del fracaso, el camino ya esté bloqueado.
El dinero sigue quemándose, la tecnología avanza lentamente,
pero el mercado de capitales sigue haciendo la misma pregunta:
¿Cuándo van a ganar dinero?
Ahora las reglas están claras:
Mientras realmente estés construyendo cohetes,
y no solo haciendo PPT,
la rentabilidad en sí misma ya no es un pecado mortal.
Por supuesto, los riesgos no han desaparecido,
los cohetes todavía pueden explotar,
las pruebas todavía pueden fallar.
Pero esa especie de pánico de “yo corro desesperadamente hacia adelante, pero no sé si hay una salida al final”,
finalmente ha sido reducido en un 50%.
Esto no es una oportunidad para hacerse rico de la noche a la mañana,
sino para decirle a todos los que todavía persisten:
Este camino, al menos, está abierto.