El mercado spot en estos dos años ha sido como sangrar a un animal, perdiendo poco a poco. ¿Por qué? Porque en el mercado de contratos vecinos la ola de apalancamiento es demasiado grande. Escuchamos historias de apostar todo con 100x y decidir la vida o la muerte en una sola jugada, ¿quién todavía piensa en tomarse su tiempo en el mercado spot?

Pero aquí hay una verdad cruel: los contratos son simplemente un juego de suma cero. Lo que gana una persona, necesariamente lo pierde otra. La mayoría de los minoristas que entran solo sirven como canal para que las grandes instituciones les den dinero. En comparación, en el mercado spot, incluso en el peor de los casos, puedes mantener tu BTC y esperar la próxima tendencia alcista, siempre hay esperanza. ¿Y si se liquida un contrato? La cuenta se limpia por completo.

Pero la naturaleza humana es así: cuanto más emocionante, más te engancha. El resultado es la situación actual: los jugadores con fondos suficientes ya se han lanzado al campo de batalla PVP de los contratos, y lo que queda solo puede fingir estar muerto en el mercado spot. Los que realmente están dispuestos a construir posiciones con paciencia, o son instituciones profesionales, o son veteranos que han sido repetidamente educados por el mercado y han sobrevivido.