El director de Hollywood Carl Rinsch, conocido por "47 Ronin", enfrenta acusaciones de desviar $11 millones del presupuesto de producción de Netflix hacia el comercio de criptomonedas y compras de lujo personales. El mal uso de fondos de grandes estudios para la especulación con activos digitales plantea nuevas inquietudes sobre las brechas en la supervisión del financiamiento del entretenimiento, y sirve como una advertencia sobre la exposición descontrolada a mercados volátiles. Personas del sector cuestionan qué medidas de seguridad fallaron en este caso.