#美联储FOMC会议 De las velas en el sótano a Lujiazui: ocho años sobreviviendo en el mundo cripto

En el invierno de 2017, trabajaba en un sótano sin calefacción, haciendo trabajos esporádicos mientras vigilaba los mercados. Ocho años después, los números de mi cuenta ya no dependen del humor de nadie. Esta experiencia me enseñó cuatro lecciones, cada una pagada con dinero real.

**Detrás de una subida rápida viene una caída igual de rápida**

En aquella temporada alcista de 2017, vi una moneda subir un 320% en diez días. Sin pensármelo mucho, metí 80.000 a lo loco. Al tercer día, me llevé una bofetada del 18% y en una semana perdí 60.000. Más tarde entendí la lógica: cuando la subida supera el 30%, luego el precio se lateraliza durante 3 a 5 días y de repente cae en volumen alrededor de un 15%, esa es la señal de que las manos fuertes están saliendo corriendo. He visto esta formación de velas infinidad de veces, y nunca ha fallado.

**El lateral en máximos no es para que tú entres**

En 2019 cometí ese error. Tuve varios tokens principales lateralizando durante dos meses, pensé que era solo una pausa y metí más dinero con apalancamiento. Acabé perdiendo la mitad. Ahora lo tengo claro: si el lateral dura más de 20 días, el volumen de rotación está por debajo del 2% y el precio se desvía más de un 20% de la media de 20 días, no es acumulación, es distribución. Mi sistema ahora detecta ese patrón y reduzco posición de inmediato. Ya nunca apuesto.

**El verdadero suelo está en el volumen**

En la gran caída del 12 de marzo de 2020, intenté cazar el suelo en $LINK y me quedé atrapado. Aprendí que no hay que fijarse solo en lo que cae el precio, sino en el volumen. ¿Cómo es un suelo real? Lateralización con poco volumen y luego tres o cuatro días seguidos de pequeñas velas verdes con volumen creciente. El año pasado, $BTC tuvo esa formación sobre los 25.000; entré a tope y salí completamente en 42.000, ganando 5,8 millones en una sola operación. Esta vez gané usando el método correcto, y la mentalidad fue otra.

**Sobrevivir es ganar**

Después de tantos años en cripto, la mayor lección que he aprendido es sencilla: no se trata de ser el más listo, sino de quién sobrevive más tiempo. Ahora solo opero con la mitad del capital y nunca uso apalancamiento. El año pasado entré en $PEPE solo cuando el volumen se multiplicó por cinco, y en cuanto se rompió la tendencia, tomé beneficios de inmediato. Terminé ganando 12 veces mi inversión y esquivé el gran desplome posterior.

El mercado nunca deja de cambiar, pero la naturaleza humana no cambia. Mantén tus principios y vivirás más tiempo.