Mucha gente está esperando el fin del QT de la Reserva Federal para proclamar el inicio de un mercado alcista, pero la verdad es: la flexibilización cuantitativa nunca ha sido una herramienta para adornar tiempos de bonanza.
Si revisas la historia, verás el patrón con claridad: tras la quiebra de Lehman en 2008 o la crisis de liquidez en marzo de 2020, la QE llegó con retraso. No es una vacuna preventiva, sino un medicamento de emergencia. En otras palabras, la verdadera inyección de liquidez suele ir acompañada de algún tipo de colapso: o bien una venta masiva rápida por pánico, o bien una recesión sostenida como la rana que se cuece a fuego lento.
Así que la cuestión ahora no es si el mercado subirá, sino si serás capaz de resistir el inevitable retroceso que se avecina. El mercado no sube en línea recta; siempre hay un precio que alguien debe pagar. Los activos que sobreviven a los ciclos siempre cambian de manos en medio del pesimismo extremo.
Aguanta la exposición al riesgo, y deja el resto en manos del ciclo de liquidez.
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Mucha gente está esperando el fin del QT de la Reserva Federal para proclamar el inicio de un mercado alcista, pero la verdad es: la flexibilización cuantitativa nunca ha sido una herramienta para adornar tiempos de bonanza.
Si revisas la historia, verás el patrón con claridad: tras la quiebra de Lehman en 2008 o la crisis de liquidez en marzo de 2020, la QE llegó con retraso. No es una vacuna preventiva, sino un medicamento de emergencia. En otras palabras, la verdadera inyección de liquidez suele ir acompañada de algún tipo de colapso: o bien una venta masiva rápida por pánico, o bien una recesión sostenida como la rana que se cuece a fuego lento.
Así que la cuestión ahora no es si el mercado subirá, sino si serás capaz de resistir el inevitable retroceso que se avecina. El mercado no sube en línea recta; siempre hay un precio que alguien debe pagar. Los activos que sobreviven a los ciclos siempre cambian de manos en medio del pesimismo extremo.
Aguanta la exposición al riesgo, y deja el resto en manos del ciclo de liquidez.