La infraestructura de FIL acaba de recibir una mejora importante para cargas de trabajo de IA. La red ha lanzado Warm Storage como un nuevo nivel de acceso, situado entre el almacenamiento en caliente y en frío, con verificación onchain por horas. Lo interesante aquí es el modelo de acceso vinculado a contratos: la recuperación de datos está directamente atada a la lógica de los smart contracts, lo que podría ser relevante para casos de uso con altos requisitos de cumplimiento.

La entrega Beam es la otra pieza clave. Velocidades de recuperación más rápidas, pruebas onchain integradas. Todo el sistema parece diseñado para pipelines de entrenamiento de IA que necesitan una procedencia de datos verificable sin sacrificar velocidad. No es exactamente revolucionario, pero sí práctico para cualquiera que esté construyendo modelos de ML sobre infraestructura descentralizada.

Aún es pronto para saber si esto marcará la diferencia en la adopción, pero la dirección técnica tiene sentido. El almacenamiento descentralizado finalmente empieza a comportarse menos como archivos fríos y más como una infraestructura real.