Cuando el mercado está inestable, lo que más molesta son esos proyectos que son reservados. Sin embargo, lo que ha hecho River esta vez es bastante interesante: después de pausar el canje de puntos, no se hicieron los desentendidos, sino que directamente abrieron la toma de decisiones. Antes, era el equipo quien decidía, ahora se ha convertido en una gobernanza abierta, donde todos pueden participar en la discusión. En estos tiempos, no hay muchos proyectos que aumenten proactivamente la transparencia, especialmente en momentos críticos de fluctuación del mercado. El modelo de gobernanza ha pasado de reuniones a puertas cerradas a un foro abierto; al menos en cuanto a actitud, han superado la prueba.