Las grandes farmacéuticas acaban de hacer un movimiento estratégico en la carrera por los medicamentos contra la obesidad. Una potencia farmacéutica estadounidense aseguró un acuerdo con Metsera Inc., una empresa que trabaja en tratamientos de próxima generación para el control del peso. Se dice que superaron a un importante competidor europeo que ya domina el mercado de medicamentos para la pérdida de peso con productos de éxito. La batalla por la oferta muestra lo caliente que se ha vuelto esta área terapéutica. Con los medicamentos contra la obesidad convirtiéndose en franquicias de miles de millones de dólares, todos quieren su parte en la acción. Esta adquisición podría redefinir el panorama competitivo, ya que las empresas luchan por diversificar sus pipelines más allá de los best-sellers existentes.