Taproot se suponía que sería la actualización de Bitcoin que finalmente cumpliría con las promesas de privacidad y eficiencia. En cambio, se ha convertido en el epicentro de una guerra ideológica dentro de la comunidad de Bitcoin.
La Queja Principal
El desarrollador de Bitcoin Core, Jimmy Song, no se contuvo en sus críticas recientes: Taproot abrió la puerta exactamente a lo que Satoshi quería evitar—una red inundada de datos no financieros. Los Ordinals, BRC-20s y ahora Runes están tratando a Bitcoin como una capa de datos, no como una red de pagos. ¿Cuál es la queja de Song? Las firmas Schnorr y los caminos de Script de la actualización estaban diseñados para simplificar las operaciones multisig. En cambio, se convirtieron en la base técnica para un caso de uso completamente nuevo que nadie pidió.
La División
Pero aquí es donde se pone interesante: la comunidad de Bitcoin está fundamentalmente dividida sobre si esto es una característica o un error.
Equipo “Mantener Bitcoin Puro”: Adam Back, Luke Dashjr y Song argumentan que Bitcoin debe seguir siendo dinero electrónico peer-to-peer, tal como lo diseñó Satoshi. ¿El problema? La inflación de transacciones por Ordinals. ¿La contaminación de la red?
Equipo “Dejar que pase”: El creador de Ordinals, Leonidas, invierte la narrativa por completo. Afirma que Ordinals y Runes salvaron el modelo de seguridad de Bitcoin. ¿Por qué? Porque generaron más de $500M en tarifas de transacción. A medida que las subvenciones de minería disminuyen, esas tarifas de inscripción se convierten en el sustento económico que mantiene incentivados a los mineros.
Los Números C cuentan una historia
Aquí es donde se pone interesante: Leonidas no está inventando eso. Según Dune Analytics, las tarifas de Ordinals han fluctuado mucho—desde $3,060 hasta $537,400 diarios en 2025. ¿El pico? $9.99 millones el 16 de diciembre de 2023. Esa volatilidad tiene sus pros y sus contras: demuestra que los ordinals pueden importar para la seguridad de Bitcoin, pero también muestra que las tarifas son poco confiables como fuente de ingresos a largo plazo para los mineros.
El Giro Reciente
En junio, más de 30 desarrolladores de Bitcoin Core votaron para aumentar el límite de OP_RETURN de 80 bytes—facilitando esencialmente la inscripción de datos en la cadena. Pero ya han comenzado los rumores de revertir esa decisión, con algunos desarrolladores considerando Bitcoin Knots como un cliente alternativo que podría rechazar completamente los Ordinals.
El Verdadero Problema
Taproot no fracasó—tuvo éxito demasiado bien. Permitió algo que los puristas de Bitcoin nunca quisieron: una capa de liquidación generalizada para cualquier cosa que no sea moneda. Y ahora, los desarrolladores de Bitcoin están atrapados debatiendo si eso es innovación o contaminación. Mientras tanto, los Ordinals siguen avanzando, las tarifas fluctúan y los mineros ven cómo sus subsidios se reducen.
Una cosa es segura: Taproot se suponía que acabaría con los debates sobre el futuro de Bitcoin. En cambio, los cristalizó.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
La paradoja de Taproot: Cómo la actualización de Bitcoin se convirtió en la característica más divisiva de la red
Taproot se suponía que sería la actualización de Bitcoin que finalmente cumpliría con las promesas de privacidad y eficiencia. En cambio, se ha convertido en el epicentro de una guerra ideológica dentro de la comunidad de Bitcoin.
La Queja Principal
El desarrollador de Bitcoin Core, Jimmy Song, no se contuvo en sus críticas recientes: Taproot abrió la puerta exactamente a lo que Satoshi quería evitar—una red inundada de datos no financieros. Los Ordinals, BRC-20s y ahora Runes están tratando a Bitcoin como una capa de datos, no como una red de pagos. ¿Cuál es la queja de Song? Las firmas Schnorr y los caminos de Script de la actualización estaban diseñados para simplificar las operaciones multisig. En cambio, se convirtieron en la base técnica para un caso de uso completamente nuevo que nadie pidió.
La División
Pero aquí es donde se pone interesante: la comunidad de Bitcoin está fundamentalmente dividida sobre si esto es una característica o un error.
Equipo “Mantener Bitcoin Puro”: Adam Back, Luke Dashjr y Song argumentan que Bitcoin debe seguir siendo dinero electrónico peer-to-peer, tal como lo diseñó Satoshi. ¿El problema? La inflación de transacciones por Ordinals. ¿La contaminación de la red?
Equipo “Dejar que pase”: El creador de Ordinals, Leonidas, invierte la narrativa por completo. Afirma que Ordinals y Runes salvaron el modelo de seguridad de Bitcoin. ¿Por qué? Porque generaron más de $500M en tarifas de transacción. A medida que las subvenciones de minería disminuyen, esas tarifas de inscripción se convierten en el sustento económico que mantiene incentivados a los mineros.
Los Números C cuentan una historia
Aquí es donde se pone interesante: Leonidas no está inventando eso. Según Dune Analytics, las tarifas de Ordinals han fluctuado mucho—desde $3,060 hasta $537,400 diarios en 2025. ¿El pico? $9.99 millones el 16 de diciembre de 2023. Esa volatilidad tiene sus pros y sus contras: demuestra que los ordinals pueden importar para la seguridad de Bitcoin, pero también muestra que las tarifas son poco confiables como fuente de ingresos a largo plazo para los mineros.
El Giro Reciente
En junio, más de 30 desarrolladores de Bitcoin Core votaron para aumentar el límite de OP_RETURN de 80 bytes—facilitando esencialmente la inscripción de datos en la cadena. Pero ya han comenzado los rumores de revertir esa decisión, con algunos desarrolladores considerando Bitcoin Knots como un cliente alternativo que podría rechazar completamente los Ordinals.
El Verdadero Problema
Taproot no fracasó—tuvo éxito demasiado bien. Permitió algo que los puristas de Bitcoin nunca quisieron: una capa de liquidación generalizada para cualquier cosa que no sea moneda. Y ahora, los desarrolladores de Bitcoin están atrapados debatiendo si eso es innovación o contaminación. Mientras tanto, los Ordinals siguen avanzando, las tarifas fluctúan y los mineros ven cómo sus subsidios se reducen.
Una cosa es segura: Taproot se suponía que acabaría con los debates sobre el futuro de Bitcoin. En cambio, los cristalizó.